Una explosión en un centro para ver fútbol en el noreste de Nigeria cobró la vida de varias personas que seguían el partido Brasil-México del Mundial 2014.
Hay informaciones contradictorios sobre el número de muertos.
Una fuente hospitalaria que habló bajo la condición del anonimato dijo que 21 personas murieron en la explosión y otras 27 resultaron heridas.
“Todas las víctimas son jóvenes y niños. Sufrieron quemaduras, tejidos rotos, huesos destrozados”, declaró.
Un policía dio una cifra más baja de muertos y dijo que fueron 10 los muertos. La fuente del hospital aclaró que su cifra se basa en los cadáveres que llegaron a la morgue.
El incidente ocurrió en las afueras de Damaturu, informaron las fuentes.
El explosivo estaba oculto en una bicicleta motorizada que se encontraba afuera del centro.
El noreste de Nigeria es la zona de grupo Boko Haram, los militantes islamistas que secuestraron a decenas de niñas en abril pasado.
Un policía de Yobe, en Damaturu, dijo a CNN que el grupo extremista había distribuido folletos en los centros de exhibición, en tres idiomas distintos, advirtiéndoles que no los abrieran durante el Mundial de fútbol.