Para frenar la ola de agresiones, amenazas y actos discriminatorios contra personal médico y enfermería que se ha observado en días recientes, el senador Salomón Jara Cruz presentará una iniciativa para que este tipo de agresiones sean consideradas un delito federal y sancionadas con una pena de cinco a veinticinco años de prisión y multa de mil 500 veces el valor de la Unidad de Medida y Actualización.
Con la propuesta del legislador morenista, que adiciona un artículo 140 BIS al Código Penal Federal, también serán sancionados los ataques contra instalaciones hospitalarias.
Artículo 140 bis: Se impondrá pena de cinco a veinticinco años de prisión y multa de 1500 veces el valor de la Unidad de Medida y Actualización, al que impida, obstruya o entorpezca la prestación de los servicios de salud, o bien, atente contra la integridad del personal médico y de enfermería o de las instalaciones que formen parte del Sistema Nacional de Salud, en el contexto de una emergencia sanitaria, con el fin de negar el acceso a la atención médica a las personas que así lo necesiten.
La propuesta también incluye la modificación al artículo 427 de Ley General de Salud.
Artículo 427 para señalar que: Cuando se interfiera con el ejercicio de las funciones de la autoridad sanitaria o la rebeldía ponga en peligro la salud de las personas en el contexto de una emergencia sanitaria, se estará a lo dispuesto en el artículo 140 bis del Código Penal Federal.
“En días recientes hemos observado, con preocupación e indignación, el incremento de agresiones contra personal médico y de enfermería bajo la falsa premisa de que al estar en contacto con enfermos de Covid-19, son portadores del virus y una fuente de contagio”, añadió Jara Cruz.
Dijo que esta situación es consecuencia de la infodemia que ha inundado las redes sociales y que han alimentado irresponsablemente políticos que observan en la emergencia sanitaria la oportunidad de obtener un beneficio político.
“Sembrar el temor, la desinformación y rumores, busca obstaculizar la actuación de las autoridades en un momento en el que debe apoyárseles, y en este caso, contra quienes constituyen la primera línea de defensa contra el coronavirus”, acusó.
Refrendó que qu enes ataquen al personal médico y de enfermería, así como a las instalaciones hospitalarias, deben ser sancionados con severidad, “porque no solamente atentan contra la integridad de quienes protegen nuestra salud sino que sabotean el acceso a la atención médica a las personas que así lo necesiten durante esta emergencia sanitaria”.