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León, Gto. (31 agosto 2021).- Nuevamente elementos de policía municipal son señalados por obstruir la labor periodística, y evitar la libre manifestación a un grupo de madres de colectivos de búsqueda de personas desaparecidas a las afueras de la Presidencia Municipal.
En el Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, las madres del colectivo “Madres Guerreras” pegaron las fotografías de sus hijos en la plaza principal a las afueras del Palacio Municipal; eran unas 20 mujeres que solo querían alzar la voz por la desesperación que sienten por la desaparición de sus hijos.
Tres preventivos (dos hombres y una mujer) armados y con chalecos antibalas, les exigieron levantar su material e irse del lugar, “esta prohibido en este lugar manifestarse, así que quiten sus pancartas y retírense”, expresaron los agentes a las mujeres.
Las madres se sintieron vulnerables y les pidieron que sólo les dieran 10 minutos para retirarse del lugar.
LLEGAN PERIODISTAS Y TRATAN DE AMEDRENTARLOS
Mario “N”, llegó a cubrir la manifestación pacífica, sin embargo al llegar se percató de como los policías municipales les exigieron a las mujeres se retiraran del sitio, de manera prepotente.
“Yo comencé a tomar fotografías del hecho, de lo que estaba pasando, de como un servidor público (policía) amedrenta a las manifestantes para que se retiren del lugar”, narró.
Sin embargo el preventivo se percató de que se levantaban imágenes, se dirigió al periodista gráfico para exigirle que dejara de tomar fotografías de manera prepotente y amenazante.
“Me dijo que la Constitución lo amparaba, y le pregunte que en que parte de la Constitución dice eso, que esta obstaculizando la labor periodística. Me comenzó a tomar fotos a mi, y me dijo ‘ahora ya me la cobré, ya estamos a mano”, expresó.
Las madres se fueron del lugar asustadas y entraron a uno de los templos para resguardarse.
HABÍA OBSERVADORES DE DERECHOS HUMANOS
En la manifestación estuvieron presentes personal de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDHEG), por lo que se levantó un acta, donde el periodista Mario “N”, levantó su queja por la obstrucción a su labor periodista. Las mujeres estaban tan asustadas que evitaron la queja, solo se resguardaron en el templo para luego irse.
“Sentí frustración, coraje, pero me sentí vulnerable, ellos (policías) tienen la ley en sus manos, podían arrestarme o hasta golpearme, creo que el hecho de que llegaran más periodistas compañeras, evitó que el elemento ir más allá”, refirió el comunicador.
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