El PRD reprobó el asesinato de los alcaldes de Pungarabato, Guerrero, Ambrosio Soto, y el de San Juan Chamula, Chiapas, Domingo López.
El partido hizo un llamado al gobierno federal a crear una política de seguridad que atienda a las autoridades municipales que han sido amenazadas.
“Es muy peligroso, lamentable y alarmante que la población conozca en voz de un gobernante que se responsabiliza a una persona de un crimen por transitar a deshoras”, dijo Alejandra Barrales, presidenta del PRD, con respecto a las declaraciones del gobernador Héctor Astudillo, sobre el homicidio de Ambrosio Soto.
El PRD se puso en contacto con Renato Sales, comisionado de seguridad de la Secretaría de Gobernación, para tratar el tema el fin de semana y Barrales hizo una solicitud para reunirse Miguel Ángel Osorio Chong a fin de plantear una estrategia de seguridad para ediles en riesgo.
“No se trata de pedir escoltas para los presidentes municipales. Esperamos una respuesta pronta e integral que atempere este tipo de problemáticas en regiones donde está muy identificados los riegos”, comentó Barrales.
Beatriz Mojica, secretaria general del sol azteca, consideró que las medidas cautelares otorgadas por la Policía Federal a Soto no funcionaron, por lo que sienta un mal precedente para otros alcaldes que denuncien amenazas.
Ambrosio Soto acudió al CEN del PRD para poner a disposición su cargo por amenazas, por lo que la dirigencia nacional presentó denuncias ante la PGR, posteriormente se le otorgaron escoltas de la Policía Federal y se implementó un operativo en Tierra Caliente, explicó Mojica.
No obstante, el alcalde denunció hace tres semanas que el operativo se retiró y recibió amenazas nuevamente antes de ser ejecutado el pasado domingo.