En un juego intenso, pero con poco futbol, Atlas le dio un empujoncito en la tabla del descenso a su máximo rival, el Guadalajara. Con gol de Enrique Pérez, los zorros se aseguraron el segundo lugar general en el Clásico Tapatío. Chivas sigue sin gol, sin puntos pero con la esperanza que apoyados en un nuevo entrenador, solucionen el problema de gol, de futbol y del descenso.
Guadalajara fue un equipo atrevido, fresco y ofensivo los primeros minutos. Atlas esperó en su campo, confiaba en su línea de mediocampistas para soportar las acometidas rojiblancas. La combinación de estos elementos suponía que Chivas podría brindar una alegría a su afición; máxime que el nuevo entrenador, Ramón Morales, diseñó un planteamiento ofensivo.
Pero Atlas hizo valer el mayor peso específico de sus hombres. De a poco Édgar Castillo ganaba la banda izquierda y «Poncho» González entró en contacto con el balón en zonas ofensivas. Cuando Chivas perdió el balón, ambos equipos se enfrascaron en una lucha muy intensa, que terminó con varios hombres golpeados. Los rojinegros aprovecharon su primera jugada de gol en la táctica fija. «Poncho» González recuperó un balón en un córner, se metió al fondo y tiró un centro que fue rematado por Enrique Pérez para dejar sin oportunidad a Rodríguez, era el minuto 24.
Poco pudo hacer Chivas con el gol en contra. Reyna desapareció, Bravo luchaba en solitario y la escasa participación de Arce se repitieron el reto del primer tiempo. Chivas se fue en desventaja, pero el segundo lapso saltaron al campo dispuestos a revertir su suerte. Los primeros 15 o 20 minutos del complemento fueron rojiblancos. Mas las jugadas de verdadero peligro no se presenaron.
Tras este pasaje de asfixia, Atlas volvió a tener la pelota y a lucir en la circulación. Aldo Leao impuso su ritmo, Millar realizó un buen trabajo y «Ponchito» volvió a lucir en el plano individual. Atlas disponía ahora del ritmo y a Guadalajara se le escapaban más puntos en casa. Con la desesperación y el hambre de no perder el Clásico, Chivas se lanzó al frente de forma desordenada. Vilar tuvo que cortar algunos balones, pero no hubo una intervención de gran exigencia.
Atlas pudo marcar el segundo en sendos contragolpes, sin embargo, González y Caballero desperdiciaron sus oportunidades. Al final, Chivas se fue en blanco y sigue estancado en su lucha porcentual. Además, espera al nuevo entrenador para recomponer el camino. A los zorros, el triunfo como visitante le sirve para escalar al segundo lugar general de la tabla.