Los intensos operativos militares iniciados la semana pasada en el estado de Sinaloa culminaron la mañana de este sábado en el paradisiaco puerto de Mazatlán, con la recaptura de Joaquín El Chapo Guzmán, el líder del Cártel de Sinaloa.
La noticia de la detención se difundió primero en Estados Unidos y después rebotó en México. La agencia estadunidense Associated Press (AP) soltó la primicia a las 9:54 horas.
Con base en dichos de un funcionario de “alto rango”, AP lanzó la primera alerta así:
“Un funcionario estadunidense de alto rango dijo que Guzmán fue capturado con vida en la ciudad. El funcionario, que no estaba autorizado a hablar sobre el arresto, dio la información bajo condición de no ser identificado.
“Los operativos en Sinaloa se han efectuado de manera ininterrumpida desde el 13 de febrero pero los detalles de los resultados han sido difundidos de manera escueta. (AP – Información preliminar)”.
La primicia fue reforzada minutos después por el portal de noticias del diario The New York Times, con la difusión de una fotografía de El Chapo con el torso desnudo y leves hematomas en el rostro.
Aun sin una confirmación oficial de las autoridades mexicanas, los principales diarios subieron la noticia a sus portales electrónicos. La Secretaría de Gobernación convocó luego a una rueda de prensa que más tarde canceló lo que abrió un espacio a las dudas.
Las especulaciones terminaron a la 13:50 horas, cuatro horas después del suceso, cuando el presidente Enrique Peña Nieto confirmó la noticia en su cuenta de Twitter: “Reconozco la labor de las instituciones de seguridad del Estado mexicano, para lograr la aprehensión de Joaquín Guzmán por cuya cabeza la DEA ofrecía 5 millones de dólares desde hace 13 años y la Procuraduría General de la República (PGR) 30 millones de pesos.
Con información de PROCESO