Yuriria, Gto. (18 julio 2024).- Los familiares ven con tristeza los tres ataúdes. En una casa humilde se acondicionó un cuarto donde se colocaron las tres cajas, los dos abuelos y el nieto de apenas 13 años de edad.
Para la madre del menor e hija de las dos víctimas (papá y mamá), la duda principal es ¿por qué?, se equivocaron los criminales, fue un asalto, sin embargo también los invade el temor.
«Nos tocó una mala suerte, nos tocó una equivocación, nos tocó simplemente estar donde no debían, no sé qué pasó, pero nosotros estamos tranquilos”, refirió.
LOS ABUELOS Y EL NIÑO TRABAJABAN DE ALBAÑILES
El papá de Gabriela se desempeñaba como albañil y trabajaba desde hace tres meses en la finca donde fueron asesinados. Su mamá y su hijo eran peones.
Gabriela solo pide tener paz, el dolor ya está y no se puede hacer nada. «nosotros no queremos nada, nosotros no queremos nada más que tranquilidad y paz, ya con la justicia no ganamos nada, nuestro dolor ya está”.
El padre de Gabriela era el «maistro» albañil, encargado de la obra, su esposa y su nieto le ayudaban como peones. El se llevaba al niño para enseñarlo a trabajar, refirió su madre.
LOS COLADORES TENÍAN UN DÍA DE CONTRATADOS
Las otras tres víctimas eran tres jóvenes que habían sido contratados para realizar el colado. En la finca se pueden ver los cimientos y algunas cadenas preparadas previo a la construcción del techado.
Los cuerpos de las 6 víctimas fueron localizados entro de la finca y aun se desconocen las causas del ataque. Las autoridades se han mantenido herméticas y sin información del caso.
