A casi un año de haber ingresado al penal de Tepepan, Elba Esther Gordillo goza de una serie de privilegios que le han permitido, hasta el momento, no pisar una celda como las demás reclusas.
En su habitación del Aislado 2 del Hospital General Torre Médica Tepepan la exlideresa del SNTE dispone, entre otras cosas, de una cama especial de posiciones múltiples, además del puntual suministro de sus medicamentos, de acuerdo con información que este domingo publica el diario Reforma.
La maestra cuenta también con una regadera privada, viste con ropa deportiva de diversos colores y zapatos de marca, unos flats de Salvatore Ferragamo.
La comida le es prescrita por un médico de cabecera, quien a la vez es nefrólogo del Hospital Ángeles del Pedregal.
Sus alimentos son preparados en casa de su hija Maricruz Montelongo, casada con Fernando González Sánchez, exsubsecretario de Educación Básica en el sexenio pasado.
Incluso Gordillo goza del servicio de un mensajero que a bordo de una moto atraviesa la ciudad desde el Club de Golf Bosques de Santa Fe a Tepepan para llevarle su comida en contenedores de plástico que la preserva caliente, agrega el diario.
El menú para Elba Esther cambia cada semana e incluye avena, fruta, pescado, salmón, espagueti y agua marca Fiji. Para comer, se auxilia de una mesa rodable con la que acerca sus alimentos sobre su cama.
Tras comer, lee en un sillón reposet y luego recibe clases de yoga y meditación de una entrenadora personas, detalla Reforma.
Supuestamente la práctica de esas disciplinas le han ayudado a controlar la depresión que sufría al ser privada de su libertad.
Durante las mañanas Gordillo recibe la visita de su hija Maricruz quien permanece con ella por varias horas.
La maestra también tiene a su alcance en su cuarto un calefactor, una maceta, una maleta y algunos libros de Osho.
Espléndida como en sus días en libertad, a las reclusas que dan a luz en la torre médica Elba Esther les regala ropa y accesorios para sus bebés.
Por ejemplo, en Navidad obsequió a sus amigos 100 bolsas de rafia elaboradas por las internas, con un costo de 100 pesos cada una.