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La Iglesia católica en México buscará replicar experiencia italiana en atención a víctimas frente al crimen organizado, por lo que se pronunció por la conformación de una red que permita el fortalecimiento de las capacidades eclesiales para atender a quienes han padecido a causa de la violencia que se vive en el país.
En el marco del «Taller de Modelos de Atención a Víctimas», organizado por la Comisión Episcopal para la Pastoral Social (CEPS), su secretario ejecutivo, Óscar Arias Bravo, sostuvo que el crimen organizado no se enfrenta sólo criminalizando a las personas que cometen el delito, sino con una atención integral.
En la página electrónica de la Arquidiócesis, el sacerdote comentó que «no se trata sólo de llenar las cárceles de personas, sino de actuar de forma más amplia e integral, procurando también atender a las víctimas de la violencia y a quienes han sufrido la pérdida de un ser querido, esté o no vinculado al crimen organizado».
Explicó que el modelo italiano de atención a víctimas prevé el trabajo en conjunto con otras asociaciones, a fin de fortalecer el tejido social:
«Cuando esto ocurre, el crimen organizado tiene un espacio más reducido para moverse con su impunidad y corrupción, ya que, ante una comunidad organizada, participativa e involucrada, le cuesta trabajo subyugar bajo el temor y la amenaza, tanto a asociaciones como a particulares».
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