El retiro de la escultura en honor al papa Benedicto XVI por su visita a León generó controversia, la Alcaldesa Bárbara Botello Santibáñez afirmó que el escultor la retiró por voluntad propia; en tanto el autor señala que lo obligó el gobierno.
Pedro Rodríguez Valadez, escultor leonés indicó que a principio del mes recibió una notificación de la dirección de desarrollo urbano donde se le pedía el permiso para que se exhibiera la estatua y al no contar con este, se le pedía a la brevedad el retiro de la misma.
“No es cierto, me exigieron un permiso, no lo tengo y me obligan a retirarla, porque no me gustaría estar fuera del marco de la ley. Lo que no se vale es que digan que yo me la llevé por mi gusto”.
Un día después del retiro de la escultura, se le cuestionó a la alcaldesa Bárbara Botello si buscaría recuperarla al ser un emblema del centro de la ciudad, además de representar la única visita del Papa Emérito a León, a lo que la Alcaldesa respondió tajantemente que no les interesaba recuperarla.
“No, no hay ningún interés, además está muy chaparrita”.
El artista refirió que el permiso se lo dio la administración panista, sin embargo fue sólo de palabra.
Rodríguez Valadez ofreció una disculpa por no contar con el permiso de piso, aunque se dijo sorprendido por la actitud del gobierno priísta.
El oficio fue consumado y firmado por la Directora de Ciudad Histórica, Celina Padilla.
En el documento fue presentado y se especifica hora y fecha límite para el retiro de la escultura (12 de noviembre a las 10 de la mañana) lo que se cumplió este día.