«El Chapo», como un modelo aspiracional

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Pocas horas después de darse a conocer la captura de Joaquín el Chapo Guzmán el pasado sábado, los acordes de un nuevo corrido dedicado al jefe del cártel de Sinaloa se popularizaron rápidamente en la red.

El cantante Osiris Valencia y su amigo Víctor Manuel Barcelo, compusieron el mismo día una canción sobre el hombre «más buscado del mundo».

«Fue una desgracia la que yo viví, la gracia fue la que me convertí, multimillonario de los más buscados, nunca olvido el rancho en el que nací», dice el corrido titulado La captura del Chapo.

«Nos fuimos más a la vida del señor Joaquín, de cómo fue escalando, no de manera delincuencial, pero sus triunfos en la vida de cómo se hizo rico de la noche a la mañana vendiendo naranjas a millonario en todas las revistas», dijo el músico en entrevista telefónica desde Tucson, Arizona.

En esa relación entre el narcotráfico y las manifestaciones culturales —principalmente en el norte de México— está presente una sensación de «adrenalina», tanto en escritores como músicos, según el escritor y periodista Alejando Almazán, quien conoce bien la zona.

El corrido compuesto por Valencia, es uno entre decenas de temas dedicados a el Chapo, oriundo de Sinaloa y que fundó un «imperio» al mando del cártel de Sinaloa.

 

«Tenemos casi 100 años conviviendo con ellos (los narcotraficantes), son nuestros vecinos. (Son algo que) ya está arraigado, no lo puedes borrar de nuestra vida cotidiana y es muy difícil pintar la raya», señala el escritor y periodista Javier Valdez, originario de Sinaloa.

Para Valdez, la respuesta al arraigo de personajes como el Chapo en la cultura popular es una «costumbre» del mexicano: alimentar mitos, en parte por la ausencia de una autoridad, dijo.

La “omnipresencia y la omnipotencia” que se le ha adjudicado a el Chapo, añadió Valdez, ha provocado que este personaje «sea endiosado», además de que, agregó, en Sinaloa «todos los caminos conducen al narco».

«Vengo del pueblo, al igual que el señor Joaquín Guzmán, y nos relacionamos en la forma en que la agricultura, las milpas, en el ganado —mi padre es agricultor—», dijo Osiris Valencia.

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El mito que cayó

La literatura también ha abordado el mundo del narcotráfico, donde los protagonistas de ese mundo toman el papel central en las tramas, como sucede en la novela El hombre más buscado de Alejandro Almazán.

El éxito de las historias de narcotráfico en la literatura se encuentra en el hecho de que los lectores mexicanos se identifican con esa afrenta que los grandes capos de la droga hacen al mismo gobierno, según Almazán.

«Patéticamente, los narcotraficantes terminan siendo los buenos porque son antihéroes, por naturaleza son odiados o son queridos, el gobierno siempre va a ser el malo, y el que desafía al poder siempre será el bueno, por eso creció el mito de el Chapo Guzmán», dijo.

El novelista, ganador del premio García Márquez de periodismo en 2013, consideró que la captura de Guzmán Loera representó el fin de ese mito al quedar demostrado que ese antihéroe también es vulnerable.

«Qué esperamos si no más mitos, que de por sí ya representan a un personaje de este tipo, carismático, con un nivel alto de seducción», coincidió Valdez, autor de Con una granada en la boca.

Élmer Mendoza, escritor sinaloense de varias obras que abordan aspectos relacionados al narcotráfico, señala que la violencia en la cultura popular ha cobrado mayor importancia “como un factor aspiracional”:

“Estamos en una sociedad bastante débil con un nivel educativo aun lamentable, un desempleo peligroso y atroz. Los jóvenes ni siquiera los egresados tienen empleo, entonces imagínate a los que dejan la prepa, la secundaria, ¿qué es lo que van a hacer? Tienen muy pocas opciones, y al tener el ejemplo de Guzmán Loera, que tampoco tuvo que ir a la secundaria, creo que para todo el mundo es una tentación”.

El músico méxico-estadounidense Osiris Valencia añade que su corrido no busca poner buenos y malos, «todos venimos a este mundo con un pecado», por lo que —dice—, seguirá escribiendo de historias como la del narcotraficante arrestado.

 


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